Todas direcciones.

Siempre hay alguien que daría su vida y mil más por estar a tu lado.

lunes, 5 de diciembre de 2011

Una copa de odio indefinido.

Y ésto es lo que nos queda después de tanto apurar la copa. Te lo dije, te dije que fueras despacio, que no aceleraras de esa forma cada sorbo. Que eso no era amor, que sabía raro. Diferente. Era más agrio, y al final tan sumamente amargo que tuvimos que deshacernos del poso sin respirar y cerrando mucho los ojos para que no supiera mal. Y el horrible sabor de boca que me ha quedado ya no se va. Esto es a lo que nos has llevado, a respirar el aroma de una pasión descontrolada, a bebernos una copa de odio indefinido.

No hay comentarios:

Publicar un comentario